DESCUBRIENDO CHILES SILVESTRES: PIQUÍN, CHILTEPÍN, MASHITO, CHILTEPE…
Uno de los chiles silvestres más pequeños, cuya distribución abarca varios países como Estados Unidos, México, Guatemala y El Salvador. Se ha convertido en una joya culinaria, un remedio medicinal y una parte integral de la cultura y vida ritual de pueblos indígenas.
Además de ser el pilar económico esencial para las comunidades rurales de México.
Su distribución geográfica tan amplia desde Arizona hasta Sudamérica. Además de su variabilidad morfológica, ha llevado a que este pequeño chile sea conocido por diversas denominaciones:
Chiltepín, chile del monte, chile silvestre, chiltepec, pico de pájaro, quipín, pájaro pequeño, chile mosquito, diente de tlacuache, amashito, mashito, mash. Chigolito y chiltepe en Guatemala y El Salvador.
La peculiaridad de este chile silvestre de la especie Capsicum annuum está en su capacidad para evolucionar. Y adaptarse a diversas condiciones ambientales de su entorno, desarrollando características específicas como respuesta.
Este proceso ha dado lugar a la formación de diferentes ecotipos del chile piquín. Lo que se observa en diferentes formas y tamaños en sus frutos: redondos, ovalados, cónicos o alargados.
Por ejemplo, aquellos que se encuentran en el norte de México, especialmente abundantes en el estado Sonora, son llamados chiltepines o chile de monte. Tienen bayas redondeadas y muy pequeñas de 3-6 mm de diámetro.
Sin embargo, los que se encuentran en el centro y sur del país son llamados piquines y son de forma alargada y miden de de 8-10 mm de largo y 5-8 de ancho.
También tienen variaciones en la pungencia: mientras el picor del piquín está entre 40 000 – 60 000 SHU.
El chiltepín es mucho más pungente, entre 50,000 a 100,000 SHU.
Cuando los frutos de este chile están inmaduros tienen color verde con un toque púrpura, que se cambia al rojo intenso y brillante al madurar. Convirtiéndose en un atractivo alimento para las aves silvestres como el huitlacoche, cardenal y cenzontle, que son los principales dispersores de sus semillas.
A pesar de que existen cultivos comerciales de este chile. Hasta ahora la gran mayoría de su producción se basa en la recogida de frutos silvestres.
Lamentablemente, el deterioro de ecosistemas en el que crecen. La eliminación de su hábitat natural y prácticas poco cuidadosas de su recolección, disminuyen la población natural de este chile.
La razón por la cual los cultivos agrícolas no han podido cultivar de forma intensiva esta variedad. Es que se enfrentan con el problema de bajos porcentajes de germinación (incluso en las condiciones ambientales óptimas).
Se debe a que las semillas tienen una capa externa muy gruesa y dura y requiere un tratamiento especial con reguladores de crecimiento vegetal. Además, presenta sustancias inhibidoras que retrasan el proceso de su germinación.
Sin embargo, las semillas al pasar por el tracto digestivo de las aves se escarifican, lo que facilita su crecimiento.
En el estado de Tabasco (México), los pueblos indígenas chontales cuidan al ave pistoqué (Pitangus suphuratus) que se alimenta de chile piquín. Lo que ayuda a la dispersión natural de esta variedad, tan apreciada por los chontales.
El chile piquín tiene un impacto positivo en la salud humana gracias a vitaminas como la A y la C que actúan como poderosos antioxidantes. Previenen el daño oxidativo asociado a enfermedades degenerativas, cáncer y enfermedades cardiovasculares.
Tradicionalmente, las poblaciones indígenas utilizaban los frutos para tratar diversas dolencias. Como el asma, la tos, el dolor de garganta y los dolores de muelas,moretones, heridas abiertas, infecciones pulmonares y fiebres.
En el contexto ritual, las comunidades indígenas en la Sierra Gorda lo emplean como un elemento protector contra los malos espíritus.
Sin duda, el chile piquín es un elemento importante en la gastronomía mexicana.
Aporta picor y sabor cítrico, ahumado y almendrado a múltiples recetas. Se utiliza como condimento para hacer salsas, salmueras y escabeches.
En la cocina tabasqueña se utiliza para elaborar empanadas, coctel de camarones y el pozole.
En México, se disfruta en platillos como el menudo, el pozole o el tapixte (en Veracruz), así como en cualquier tipo de sopas.